Esta publicación participa en el XIII Carnaval de Geología alojado por La Roca Filosofal.
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Entradas relacionadas con la Petrología Metamórfica
Estudio de movimientos oculares de geólogos en el campo
Hace unos años vi por la tele un reportaje sobre un estudio que estaban haciendo unos psicólogos sobre la percepción que tiene la gente de ciertas escenas cotidianas. No recuerdo qué programa era, pero me acuerdo que estudiaban los movimientos de los ojos por medio de un sistema de cámaras y un programa informático que registraba esos movimientos. De esta manera, los que hacían el estudio podían saber hacia dónde miraban los sujetos en cada situación planteada y eso les daba información sobre los detalles que condicionan nuestra percepción de las cosas. Seguir leyendo Estudio de movimientos oculares de geólogos en el campo
Griego para petrólogos (politomo)
En la anterior entrada de esta serie me dejé este mineral. Os lo pongo porque su etimología tiene guasa (muchísima).
Piroxeno: De pyros, fuego y xeno, extraño, ajeno. Es decir, un mineral que se supone que es raro en rocas ígneas. El que le puso el nombre a este mineral sabía un montón de griego, pero de rocas ígneas no tenía mucha idea, la verdad.
Pliegue tigmático: Pliegue viene del latín plicare, que significa plegar, y tigmático viene del griego ptyssô, que significa plegar. Lo que viene siendo un pliegue arreplegao. No es que esté plegado dos veces, es que está muy plegado. Son típicos de migmatitas.
A las migmatitas que tienen estos pliegues se las podría llamar migmatigmáticas, y a los cálculos que habría que hacer para caracterizar dichos pliegues, matigmáticas.
Por increíble que parezca, tríptico significa «que se puede doblar en tres».

Poikiloblasto: Ya vimos en la primera entrada de esta serie que blasto era un término ambiguo, anfibológico. Pero en este caso, como es un sufijo, significa “que ha crecido durante el metamorfismo”. Poikilo significa varias cosas, entre ellas variado. Un poikiloblasto es un cristal que tiene variadas inclusiones.

Polimorfo: De poli, mucho y morphê, forma. Que tiene muchas formas. Se dice de las diferentes estructuras en las que se puede acomodar un determinado mineral. Famosos metapolimorfos son: andalucita-sillimanita-distena, grafito-diamante, cuarzo-coesita-tridimita-cristobalita-stishovita, calcita-aragonito.

Porfiroblasto/Porfiroclasto: Derivada de porphyros, que significa púrpura. Un famoso pórfido utilizado como roca ornamental desde los egipcios era de este color. Blasto como sufijo, ya sabéis, que crece durante el metamorfismo, y clasto, roto. Para saber la diferencia entre ambos conceptos os escribí una entrada tiempo ha.

Propilita: Esta no la iba a poner, porque a mí las rocas metasomáticas me dan un poco de repelús, pero es que la etimología es muy curiosa. Resulta que en griego, propylitês significa “alguien cerca de una puerta”. Y, ¿qué tienen que ver las puertas con las propilitas? Pues que las primeras propilitas que se definieron aparecían a las puertas del terciario.
Este peculiar nombre se lo puso el naturalista alemán Ferdinand Freiherr von Richtofen en el año 1868, tras estudiar durante seis años las rocas volcánicas básicas de California y Nevada. También puso nombre a las riolitas y a la Ruta de la Seda (no, no fue Marco Polo).
Protolito: De prôtos, primero y lithos, piedra. La roca primera, la madre de todas las rocas, de la que procede una roca metamófica, que ya sabéis que puede ser sedimentaria, ígnea o metamórfica. Otras palabras “normales” con proto son: protocolo (el primer pegamento) y protogonisto (el primer luchador).
Pseudomorfo: Es falso que pseudês es cierto, es falso. Si no os ha estallado todavía el cerebro, morphê es forma. O sea, que la forma que tiene un mineral es falsa, seguramente porque ha reemplazado a otro y ha ocupado su hueco.
La naturaleza dinámica del metamorfismo tiene como consecuencia que los minerales sean sustituidos por otros a medida que cambian las condiciones de presión y temperatura, así que los pseudomorfos son muy comunes en el metamorfismo.

Pseudotaquilita: Insisto, es falso que pseudês es cierto, es falso. Tachys es rápido, salvo en Madrid, que seguro que te pilla un atasco; usa mejor el Metro. Y a estas alturas, ya deberías saber que lithos es piedra. O sea, que sería ¿una falsa piedra que se ha formado rápido? Podría ser, ya que se trata de un vidrio resultado de la fusión producida por la energía liberada durante un terremoto.

Samita: Psammos significa arena, así que una samita es una roca detrítica con ese tamaño de grano. Ya vimos con pelita que nos gusta usar palabras derivadas del griego para referirnos al tamaño de grano de los protolitos. Jo, psefita, solo nos faltas tú.

Sericita: De syrikon, seda. Mica blanca muy suave de lo fina que es. Suele estar asociada a la diaftoresis (ver la protoparte de esta serie) de minerales ricos en aluminio, tipo estaurolita, andalucita, distena, incluso plagioclasa o cordierita.

Simplectita: De symplekô, entrelazado. Es una textura caracterizada por el intercrecimiento de dos o más minerales diferentes, uno de los cuales suele tener un hábito vermiforme (con forma de gusano). Es otra reacción diaftorésica.

Tectónica: De técton (una perturbación en la fuerzan), que significa albañil, obrero que construye… Vale, ahora ya no podré mirar a ningún tectónico sin imaginármelo vestido con un mono azul echando paladas de arena (samitas) en una mezcladora de cemento. Bien.
Tektita: De tektôs, fundido. Son gotitas de fundido que se encuentran en los eyecta que rodean a los cráteres de impacto. Se podría decir que extinguen más dos tektitas que dos carrektitas.
Xenoblástico: Xeno, ajeno, extraño, y blastos que, al ser sufijo, significa que crece durante el metamorfismo. Sería un cristal que crece durante el metamorfismo, pero cuyas caras le son ajenas. Es sinónimo de alotrioblástico (si no tuviera nada que ver, sería xenónimo; por ejemplo, xenoblástico es xenónimo de patata).
Termino ya por fin esta serie metaetimológica con un chiste que me contaron hace muchísimo tiempo, y por el que se podría decir que le pillé gusto al griego (gusto platónico, se entiende):
+Una chica llama a su amiga un viernes por la tarde para salir de marcha.
-La otra le responde: Creo que me voy a quedar en casa, es que estoy con amígdalas.
+La primera le replica: ¡Jo, tía! Tú siempre saliendo con griegos.
Tranquilidad, después de esto, ya nada puede ir a peor. En cualquier caso, ahora estais preparados (o preparadas) para salir con griegas (o griegos), aunque vuestra conversación estará limitada a la evolución metamórfica de los cinturones orogénicos.
Para qué más.
Vuelve a la Primera entrada de esta serie.
Quiero volver a leer la segunda entrada.
La opción C (la ter-C-ra) es siempre la correcta (C-rtera).
Los sapos no tienen ojos azules
Aunque las fakes news y los bulos se han generalizado en los últimos tiempos, existen desde siempre y en todos los ámbitos.
Sí, en petrología metamórfica también tenemos los nuestros, y hoy os traigo uno muy curioso.
Veréis, yo me crié en Galicia y en el instituto tuve una profesora de geología que era geóloga, así que yo había oído hablar del Ollo de Sapo desde antes incluso de saber que quería hacer geología (aunque no os lo creáis, yo iba para biólogo. Sí, todos tenemos un pasado del que avergonzarnos).
Mi profa nos contó que existían unos gneisses que se describieron por primera vez en Galicia y que se llamaban Ollo de Sapo debido a que tenían unos enormes cristales de feldespato potásico redondeados que recordaban a los saltones ojos de los sapos.
Y así viví yo feliz, con mi anecdótico conocimiento, durante algunos años.
No sé exactamente en qué momento se torció todo. Primero fue algo aparentemente inocente y tan anecdótico como el propio nombre. Resulta que otra característica de los gneisses Ollo de Sapo es que tienen cuarzos azulados (se podría decir que los cuarzos tienen a zu lado las glándulas de feldespato). Se rumorea que este color es típico del cuarzo de origen volcánico; la explicación más popular dice que el cuarzo volcánico suele ser de alta temperatura, que a esas temperaturas el titanio entra como una impureza en los intersticios de la estructura del cuarzo, y ese titanio excita el centro del color azul del cuarzo. El hecho de ser volcánico también implica que el enfriamiento ha sido rápido, de tal manera que al titanio no le ha dado tiempo a exsolverse y formar rutilo (que sepáis que el cuarzo con inclusiones aciculares de rutilo se llama sagenítico y es muy apreciado por los coleccionistas).
Bueno, pues en un momento dado, tuvo lugar un fenómeno de sincretismo y la historia pasó a ser: El gneiss Ollo de Sapo se llama así porque tiene cuarzos azulados y los sapos resulta que tienen los ojos azules.
Os pido por favor que busquéis en Google Imágenes y me digáis si veis algún sapo que tenga los ojos azules.
Un día me harté y me fui a la biblioteca a investigar. Yo ya sabía que el primero que nombró al Ollo de Sapo en la literatura geológica fue Hernández Sampelayo en su monumental obra “Criaderos de hierro de España”. Mi primera sorpresa fue que justo el volumen donde se suponía que hablaba del Ollo de Sapo no estaba. Se suponía que lo tenían, pero no estaba. Por suerte, existía otra copia en el depósito de la Real Sociedad Española de Historia Natural, así que me dejaron sacar ese volumen.

Aquí tenéis la primera página, con los datos de esa edición, título, autor, tomo, volumen, año de edición y editorial.
Pues en la página 562 de este Tomo I de Hierros de Galicia, que constituye el Tomo IV de la obra “Criaderos de hierro de España” se encuentra la primera referencia que existe al gneiss Ollo de Sapo, que reza como sigue:
Creo que está bastante claro.
¿De dónde puede venir la confusión?
Otra cita mítica del Ollo de Sapo es la de Parga Pondal et al. (1964), publicada en las Notas y Comunicaciones del Instituto Geológico y Minero de España, que lleva por título Introduction à la géologie de l’Ollo de Sapo’, formation porphyroide anté-silurienne du Nord-Ouest de l’Espagne, y que también tenemos en la biblioteca.
En este artículo dice lo siguiente:
Aunque está en francés, se entiende perfectamente, y dice que el Ollo de Sapo se caracteriza por “ojos” de cuarzo azul y de feldespatos que a menudo son de gran tamaño.
Aquí Parga la lía un poco, pero no mucho, ya que solo hace alusión al gran tamaño de los cristales tanto de cuarzo azul como de feldespato. Teniendo en cuenta que todo lo que sabemos de la geología de Galicia se lo debemos a él y su influencia continúa hoy día gracias al Laboratorio Xeolóxico de Laxe que él fundó, creo que se lo podemos pasar.

Es más, pienso hacer de este busto que veis mi lugar de peregrinación particular y, cada vez que vaya a Santiago, me acercaré a hacerle una visita a D. Isidro y le contaré todas las cosas nuevas que sabemos sobre la geología de Galicia. Vosotros también deberíais visitarlo. Ya no quedan geólogos así.
Entonces, ¿quién decidió que era el color azul y no el gran tamaño de los cristales lo que hizo a estos gneisses merecedores del nombre Ollo de Sapo?
Pues ni idea, pero creo que ya es hora de desterrar este bulo.

Si queréis saber más sobre el Ollo de Sapo, le dediqué dos programas de Geocastaway. Aquí os dejo los enlaces:
Qué regalar a un geólogo (edición 2017)
¡¡ATENCIÓN!!
NUEVA RECOMENDACIÓN AL FINAL DE LA ENTRADA
Se acerca de nuevo la por igual amada/odiada Navidad, y paso a recomendaros algunos regalos para geólogos y geólogas, porque a todos nos ha ocurrido esto cuando hemos ido de compras
1- Un puzzle: Aunque todo el mundo sabe que el mejor rompecabezas es una piedra,
menos violentos y más entretenidos resultan estos otros puzzles (vistos en Twitter gracias a Molinos).
Hablando de puzzles, el BRGM (el IGME francés) tiene un puzzle de 2000 piezas del mapa geológico de Francia que podéis encontrar aquí. Es una nueva edición, el que yo tengo es de 3000 piezas. Y si os dais una vuelta por el catálogo podréis encontrar cosas muy chulas, eso sí, en francés.
Y si os gustan los mapas y tenéis un iPhone, podéis comprar esta carcasa con el mapa de Pangea.
2- Zapatos: Hace poco vi esto en un Instagram Stories, pero que me aspen si recuerdo de quién. Me apunté la página porque me parecen unos diseños impresionantes. El verano que viene lo vais a petar, pero cuidado con llevarlo a un examen, que se podría confundir con una chuleta.
3- Libro: Me soplaron hace poco por Twitter la existencia de un libro sobre los dinosaurios en la historia del cine. Ya sabéis que no soy yo muy de paleo, pero me encantan las películas de serie B y este libro promete incluir muchas. Se convertirá en un must para muchos. El libro se llama Cinezoico, el autor es Octavio López Sanjuán, y lo publica la Editorial Rosetta.
Lo podéis comprar en este enlace.
4- Calendario: Uno de los acontecimientos más increíbles que han tenido lugar en Twitter este año ha sido la #MinCup, llevada a cabo por Eddie Dempsey. Pues aprovechando el éxito de la iniciativa, Hazel Gibson y él han sacado un calendario, que podéis adquirir aquí. Para los que no vivimos en el Reino Unido, tenemos que ponernos en contacto con Hazel por DM a través de su cuenta de Twitter para saber el coste de los gastos de envío. Si os gusta, daos prisa porque solamente han sacado 250 unidades.
5- Pegatinas: Una aplicación geológica, ROCKD, una asociación geocronológica, Earthtime, y un repositorio de pre-prints, EarthArXiv, tienen unas pegatinas muy chulas que puedes conseguir si te vas a un congreso internacional en el que tengan un stand. Seguro que en la próxima Conferencia Goldschmidt están, posiblemente también en la EGU, o en la AGU. Las pones en el portátil, en el coche, en la puerta del despacho. Donde quieras.
6- Ovillos: Si os van las manualidades, los nombres de estos hilos os van a encantar. Los tenéis también en XL.
Hablando de manualidades, el año pasado prometí hacer publicidad de esta tienda Luzonite Studio. Geológico solo tiene este ammonites, pero el resto también merece la pena. Yo tengo un Shin Chan y un colgante que le regalé a mi hija.
Hablando de la tienda ETSY, si en la entrada del año pasado os ponía el enlace a unos increíbles cojines de piedra, este año me han pasado esta otra tienda con alfombras, cojines y mantas de piedra.
Seguimos en ETSY, que es una verdadera mina. Aquí podéis encontrar sobre todo colgantes muy originales de temática geológica, pero también algún anillo y pendientes.
7- Arte microscópico: Os pasáis por esta web, pincháis en Shop y a flipar. Hay de todo, toallas de playa, pósters, bolsas, bolsos, carcasas para móviles, ropa, libretas, tazas, colchonetas de yoga. Todo con fotos de láminas delgadas al microscopio. Eso sí, están sacadas con la lámina de cuarzo, así que tienen los colores de interferencia subidos. Al principio resulta muy chocante, pero le acabas pillando el gusto.
La foto que os pongo es mía y son mucho mejores las de Bernardo Cesare (que es el petrólogo que está detrás de todo esto), pero os sirve para haceros una idea.
Hablando de microscopios, es verdad que en esta tienda, la mayoría de los productos están relacionados con biología, pero este microscopio a mí me encanta, aunque no creo que tenga polarizador.
8- Tatuaje: Si por tus venas corren litros de alcohol y silicatos en vez de sangre, considera hacerte un tatuaje geológico. En esta entrada del blog de Nhia Schamuells encontrarás algunas ideas.
Bueno, yo creo que ya os he arreglado la Navidad por este año.
De nada.
Si os ha caído algo de estas sugerencias, send photos, please.
El año que viene, más.
¡¡ACTUALIZACIÓN DE ÚLTIMA HORA!!
Siempre me pasa que después de publicar esta entrada aparecen regalos nuevos estupendos. Normalmente me los apunto para la entrada del año que viene, pero esta vez tengo que hacer una excepción.
Ya el año pasado os recomendé las camisetas de Estwing Wegener (aquí). Pues es que acaba de sacar un diseño nuevo que me ha parecido maravilloso y merece la pena que os lo pidáis para Reyes (para Papá Noel ya vais un poco pillados).
El diseño es este
y lo podéis comprar en este enlace. Y ya, de paso, os dais una vuelta por sus otros diseños.
Griego para petrólogos (tritomo)
Ánimo, que ya queda menos para terminar y entonces estaréis preparados para seguir este curso de petrología metamórfica. Seguir leyendo Griego para petrólogos (tritomo)
Griego para petrólogos (deutera parte)
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Griego para petrólogos (primera parte)
Alguien tenía que decirlo: Nuestros geoantepasados eran unos pugneteros pedantes de mucho cuidado. Seguir leyendo Griego para petrólogos (primera parte)
¿Dónde está Wally? y tus posibilidades de aprobar las prácticas de petrología
¿Os acordáis cuando comprabais el Súper Pop y os entreteníais un rato haciendo los típicos test de adolescentes? Seguir leyendo ¿Dónde está Wally? y tus posibilidades de aprobar las prácticas de petrología
Metaestratigrafía
Si ya resulta complicado clasificar una roca metamórfica relativamente homogénea, imagínate lo que será si esa roca aparece bandeada. Seguir leyendo Metaestratigrafía
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No podía haber sido otro sino el mismísimo Paul K. Feyerabend el que criticase ferozmente el uso que los científicos hacemos de nuestra particular jerigonza científica. Seguir leyendo ¿Porfiroloqué, ho?
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Uno de los aspectos más apasionantes de la Petrología Metamórfica es que de una simple roca podemos extraer una historia que se remonta millones de años atrás. Seguir leyendo #ThinSectionThursday 8: Litogenealogía
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#ThinSectionThursday 6: Hit-and-run
Interrumpimos nuestra programación habitual para comunicarles que en la madrugada del Carbonífero al Pérmico ha tenido lugar un grave atropello en la localidad alemana de Roßwein. Seguir leyendo #ThinSectionThursday 6: Hit-and-run
#ThinSectionThursday 5: Stranger in a strange land
Apenas me quedan recuerdos de mi vida anterior. Conservo tal vez alguna sensación de infancia. Y juegos. Sueño. Siento un hormigueo en el estómago. Vértigo. Subir y bajar por un tobogán. Sin final. Seguir leyendo #ThinSectionThursday 5: Stranger in a strange land
#ThinSectionThursday 4: Una pinche cuarcita mugrosa
Aunque la sede oficial de mi post-doc era la Colorado University at Boulder, pasé largas temporadas en México porque la zona de campo que estaba estudiando se encontraba en el estado de Sonora, al noroeste de México. Seguir leyendo #ThinSectionThursday 4: Una pinche cuarcita mugrosa
#ThinsectionThursday 3: Anfibolita
Hoy he seleccionado la lámina número 328 de nuestra colección Krantz, una anfibolita de la localidad alemana de Oberwolfach, situada en la Selva Negra, ¡vaya pastel! Seguir leyendo #ThinsectionThursday 3: Anfibolita
#ThinSectionThursday 2: Mi trocito de planeta predilecto
Al contrario que los perros, que pueden dar decenas de vueltas buscando su lugar preferido para tumbarse, a mí no me ha costado nada encontrar mi trocito de planeta predilecto. Seguir leyendo #ThinSectionThursday 2: Mi trocito de planeta predilecto
#ThinsectionThursday 1: Una ¿simple? pizarra
Es muy común en Twitter dedicar determinados días de la semana a alguna materia en concreto y asignarles una etiqueta (hashtag) para poder seguirlos. De manera general existe el #FF (Follow Friday), día en el que recomiendas a tus seguidores que sigan a otros usuarios de Twitter que les pueden resultar interesantes.
Los geólogos tuiteros también se han apuntado a esta moda y así tenemos etiquetas como #VolcanoMonday, #FridayFold y #FossilFriday.
Vacaciones Corneana
Aunque ya he puesto las soluciones al examen de julio de los Ingenieros Geólogos, no me quedo tranquilo. Así que, después de investigar un poco el enlace de este tuit Seguir leyendo Vacaciones Corneana